JUEGOS DE PUNTERÍA: BENEFICIOS PARA LOS MÁS PEQUEÑOS

 

Entre los juegos tradicionales y populares hay algunos que no pierden su vigencia, así tengan más de un siglo de antigüedad: saltar a la comba, patinar o jugar a la pelota siguen formando parte de la rutina de juego de los más pequeños.

Ello se debe a que, de manera natural, el niño busca formas de aprendizaje y desarrollo de sus habilidades, y -por fortuna- no todas pueden encontrarse delante de una pantalla.

Un tipo de juego que sigue siendo demandado por los más pequeños es el que pone a prueba su puntería; dianas y rifles de juguete continúan, pues, siendo un clásico.

Esta clase de actividades benefician al niño, en tanto que le ayudan a mejorar algunos aspectos físicos y mentales, ya que contribuyen a desarrollar el sistema locomotriz, a afinar la sincronización cuerpo-mente, a ampliar su capacidad de realizar movimientos precisos y rápidos, y a ejercitar la vista de una manera mucho más sana que frente a una consola de videojuegos.

Además, estos juegos al aire libre permiten al niño socializar, organizar pequeños torneos o retos y comprender la importancia del trabajo en equipo y de la competición sana.

Algunos juguetes divertidos que podemos encontrar en esta línea son las galerías de tiro, con las que se pueden organizar pequeñas competiciones. Muy demandadas también son las pistolas con fulminantes, con las que los más pequeños ponen en práctica juegos de persecución al aire libre. Este tipo de juegos, además, fomentan la concentración, algo que se demuestra en la disciplina olímpica del tiro al blanco, por ejemplo, y que puede resultar muy útil a la hora de estudiar.

En una sociedad que sobreestimula a los niños con videojuegos de imágenes irreales y movimientos imposibles, es bueno que existan juegos que permitan desarrollar las habilidades físicas y motoras, así como la percepción espacial y de movimiento.

Compartir

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *