8 consejos para congelar alimentos

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Saber congelar los alimentos correctamente tiene dos enormes ventajas: por un lado podremos ahorrar comprando ofertas o productos al por mayor, y por otro lado, aún más importante, podremos tener siempre disponibles productos frescos de estación.

8 consejos para congelar alimentos.¿Se puede congelar? ¿Fresco o cocido? ¿Cuánto dura? Responderemos a todas estas preguntas, y os daremos algunos trucos que os sorprenderán.

Es posible congelar los quesos semi blandos con alto contenido de grasa, pero tened en cuenta que puede cambiar su consistencia y textura, por lo que sugerimos que los congeléis sólo si luego los utilizaréis para cocinar.  El queso parmesano y otros tipos de quesos se congelan perfectamente apenas rallados. Podéis guardarlos en porciones y quitar del congelador sólo la porción que vais a utilizar, veréis que al descongelarse queda como apenas rallado. Pueden conservarse en el congelador entre 6 y 8 meses.

La fruta puede congelarse tomando algunas precauciones. Antes que nada, debe ser muy fresca y estar en el punto justo de maduración. Debemos lavarla con un paño húmedo (no directamente bajo el agua), y luego quitarle semillas, corazón, en fin, debe quedarnos sólo la pulpa. Las frutas pequeñas como uvas, fresas, etc., pueden ser congeladas enteras, las frutas más grandes como manzanas, peras, etc, deben ser peladas y cortadas en trozos. Si después de descongelarla usaréis la fruta cruda, debéis seguir el siguiente procedimiento: sumergirla primero en jugo de limón (para mantener vivo el color) y luego ponerla dentro de recipientes herméticos cubierta de almíbar (600 g de azúcar por cada litro de agua). Si en cambio la usaréis para cocinar, podéis reemplazar el almíbar por azúcar. Esta ‟protección” dulce ayuda a mantener la fruta, de lo contrario con el frío se ‟cuece”. Conservada de este modo, puede durar 12 meses en el congelador.

Aquí hace falta diferenciar antes que nada el uso que daremos a las verduras. En general las verduras con alto contenido de agua no pueden congelarse, a menos que las vayáis a usar luego para cocinar.

  • apio, tomate, cebolla: pueden congelarse siempre y cuando los utilicéis luego para cocinar. El tomate debe ser pasado por agua hirviendo. La cebolla y el apio deben ser cortados en trocitos, y luego utilizarlos todavía congelados.
  • ensaladas, lechuga, pepinos: no pueden ser congelados
  • todas las demás verduras: debemos congelarlas frescas, bien limpias y en buen estado. En general conviene darles un hervor rápido, pasarlas inmediatamente por agua fría para cortar la cocción, escurrirlas bien y congelarlas en porciones. Se utilizan todavía congeladas, cocinándolas luego con poca agua.

Las verduras congeladas pueden durar hasta 12 meses en el congelador.

Los huevos duros no pueden congelarse, pero se pueden congelar crudos sin problemas. Es conveniente separar las claras de las yemas, y ponerlos a congelar dentro de cubiteras. Cuando estarán congelados, podemos envolver los cubitos en film transparente y conservarlos en el congelador por 12 meses. Cuando los vais a utilizar, dejádlos descongelar en la nevera y luego utilizadlos como huevos frescos normales. Si queréis conservar la clara y la yema juntas, batidlas bien antes de congelar.

La leche, la mantequilla, el yogurt, la nata de cocina y la nata montada se pueden congelar sin problemas. Es aconsejable dividirlos en pequeñas porciones. La conservación es variada:

  • Leche y yogurt: 1 a 3 meses
  • Mantequilla o margarina: 9 a 12 meses
  • Nata montada o de cocina: 1 mes

La nata fresca no se puede montar después de congelada.

Antes de congelar la carne cruda es necesario quitarle la mayor cantidad de grasa posible. Los tiempos de conservación son bastante variables, de los 3-4 meses de la carne picada o las salchichas, hasta los 12 meses del cordero. Las chuletas de cerdo se conservan hasta 4 meses, y las de ternera hasta 9. También la carne blanca puede ser congelada entera o en partes, completamente limpia de plumas, pelos y vísceras . Las aves duran hasta 24 meses, el conejo hasta 12. Cualquier tipo de carne congeléis, debe descongelarse completamente antes de cocinarla.

Por el contrario, los embutidos no deben ser congelados porque pierden perfume y consistencia.

El pescado debe ser congelado fresquísimo, ya que es muy delicado. Antes de congelarlo debemos eviscerarlo completamente; se puede congelar fileteado o entero. La merluza y la lubina se conservan hasta 12 meses, mientras que para el resto de las especies el tiempo de conservación va de los 2 a los 6 meses, en función del contenido de grasa de la carne (más grasa, menos tiempo de conservación).

Los mariscos se conservan muy bien justamente por su bajo contenido de grasas. En general deben ser congelados crudos, mientras que las langostas y las gambas pueden ser pasadas por agua hirviendo antes de congelarlas. Los mejillones, almejas, etc. deben ser lavados con atención para quitarles cualquier residuo de arena, abiertos con el calor, pelados y puestos en recipientes herméticos junto con un poco del agua de cocción.

Muchos platos preparados pueden congelarse. Por ejemplo, las salsas para la pasta pueden prepararse en grandes cantidades y luego ser conservadas en porciones. Las salsas de tomatela salsa boloñesa o el pesto se mantienen tranquilamente hasta 3 meses.  También las carnes asadas y los caldos de todo tipo se pueden conservar por 3 meses. Lasañas, pasteles y timbales resultan muy prácticos congelados, sea crudos que cocidos.

La pasta fresca y la pasta rellena pueden congelarse sin problemas, bien cubiertas de harina para que no se peguen ni entre ellas ni al envase. La pasta rellena debe congelarse primero en fuentes o estantes, sin superponerla; cuando esté congelada podréis ponerla dentro de bolsitas para congelar.

¿Qué os parecen estos consejos? De ahora en adelante, para ahorrar tiempo y dinero ¡a congelar se ha dicho!

Vía: Pequerecetas.com

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